La digitalización de procesos en la empresa ya no es una
alternativa: lo queramos o no, está ocurriendo. La pregunta es: ¿estamos
preparados?
Cada tanto, el mundo del management adopta algún concepto
que, un poco por necesidad, otro poco por moda, todo el mundo usa, a veces sin
saber exactamente por qué. En la actualidad, la digitalización parece
ser esa palabra clave, que incluye un abanico muy diferente de prácticas y
procesos: desde escanear documentos escritos hasta la eliminación por completo
del papel; desde enviar resultados por e-mail hasta la autogestión de clientes
y proveedores; desde tener una buena página web y redes sociales hasta el
desarrollo de sistemas inteligentes que permitan satisfacer necesidades cada
vez más específicas y personalizadas.
Hasta hace pocos años, la digitalización era un valor
agregado que algunas empresas ofrecían a sus clientes; un plus de modernidad,
sofisticación y comodidad. Ahora, sin embargo, es una necesidad impuesta desde
los principales actores del sistema económico: desde el Estado, aportes,
impuestos y otras gestiones se realizan exclusivamente por la web; desde el
mercado, las transferencias, pagos y facturación se realizan de manera digital.
El proceso, sin embargo, recién está empezando, y todavía no sabemos hasta
dónde pueda llegar. Aquí te presentamos 4 aspectos del mundo de los negocios
que ya están cambiando:
– Inteligencia
artificial (IA)
La revolución industrial moderna fue posible por la automatización,
es decir, por el desarrollo de sistemas mecánicos capaces de realizar tareas
repetitivas sin necesidad de la intervención humana. Estas máquinas podían
repetir, con eficacia y precisión, la tarea para la que habían sido diseñadas,
pero eran incapaces de realizar cualquier otra tarea.
La inteligencia artificial, en cambio, no está
diseñada para repetir tareas sino para resolver problemas, y su uso es cada vez
más extendido, no sólo en empresas grandes, sino también pequeñas y medianas.
Según un estudio reciente del MIT, las áreas en las que se prevé un desarrollo mayor de IA
aplicada a los negocios son: la publicidad online, que permite llegar a
destinatarios cada vez más precisos y mejor definidos; la atención al cliente,
especialmente gracias a los chatbots
que interactúan con el público cotidianamente; y la optimización de la cadena
de suministros, mediante la evaluación en tiempo real y la comunicación digital
con proveedores. A pesar de que el 85% de los empresarios norteamericanos
consideran que la IA le permitirá desarrollar nuevos negocios, sólo el 23% ya
la ha incorporado en su compañía.
– Trabajo flexible
La digitalización ha permitido también cambios en cómo,
cuánto y de qué manera trabajamos. Al almacenar y gestionar datos de manera
digital, podemos acceder y trabajar con ellos desde múltiples dispositivos,
ajustando las actividades a las necesidades personales y estilo de vida de
nuestros colaboradores. Aunque no todas las tareas ni todas las funciones
pueden realizarse a distancia, la descentralización de algunos roles y la
tercerización de otros permiten bajar costos laborales y de infraestructura.
Por otra parte, las condiciones de trabajo flexibles permiten mejorar el clima
interno y la satisfacción y autonomía de los trabajadores, por ejemplo,
incluyendo un día a la semana de trabajo a distancia.
– Innovación y
calidad
La digitalización no consiste solamente en transferir datos
al lenguaje electrónico, sino también en encontrar nuevos usos para esas
tecnologías. En palabras de Javier Zamora, creador del Mobile thinking day,
se trata de una nueva mentalidad para hacer negocios, planteándonos nuevas preguntas: ¿qué nuevas
necesidades tienen mis clientes, cada vez más acostumbrados a la movilidad, el
acceso y las múltiples plataformas? ¿qué procesos puedo mejorar en mi empresa
al eliminar acciones presenciales o documentos físicos? ¿qué nuevos productos o
servicios puedo generar a partir de mi experiencia y la tecnología a la que
puedo acceder?
– Nuevos modelos
de negocios
El impacto de la digitalización llega al corazón de nuestras
organizaciones, puesto que nos obliga a pensar en nuevos modelos de negocios,
impensables hace una década. La revista Digitalist propone las siguientes transformaciones, entre otras:
– una expansión del alcance de nuestro negocio, que va más
allá de los segmentos de mercado tradicionales y la geografía
– una ampliación de las asociaciones clave, que nos permite
optimizar nuestra cadena de suministros en el marco de una economía global, o
distribuir nuestros productos o servicios en todo el mundo gracias a las
alianzas con otras compañías especializadas
– generar propuestas de valor más relevantes para nuestros
clientes, a quienes podemos conocer más que nunca gracias a las plataformas
digitales que usan y los contenidos que generan y consumen.